Impresionante el partido que se vivió en el ITF de $25.000 de Sunderland donde la número 479 de la clasificación femenina, Tara Moore, se llevó los titulares gracias a su espectacuar e increíble remontada ante la número 204 del planeta, Jessika Ponchet.
Ponchet mandaba en el marcador con tal autoridad que estaba a tan sólo un punto de la victoria, una pizarra que marcaba 6-5, 5-0 y 40-30, pero como si fuera una película, la francesa no pudo cerrar el choque y desde allí fue el comienzo del regreso de la británica, quien estuvo al borde del abismo, pero que nunca bajó los brazos.
Parecía imposible, pero la gesta de Moore fue paso a paso, sumando juegos, recuperando la confianza para quedarse con el segundo set en el desempate.
Luchó y no desmayó a pesar de enfrentar dos puntos para partido y en el tercero encontró su mejor versión para sellar la victoria por un 6-3 final, un duelo que seguramente no olvidará y que deja un gran ejemplo de lucha y perseverancia, un duelo que marca la historia del tenis moderno.
