Imaginen ser una de las mejores de mundo. Imaginen no poder más y terminar rompiendo a llorar. Imaginen que además compites ‘sin bandera’, porque tu país ha decidido apoyar una Guerra injusta y sin sentido. Es la historia de Victoria Azarenka, número 15 de las listas WTA, que cayó ante Rybakina en un partido que será mucho más que eso.
Partiendo de lo más básico, el 3-6 y 4-6 marca que la kazaja fue mejor que la última finalista en Indian Wells, dónde precisamente cayó ante Paula Badosa en la gran actuación de la española. Con 2-2 y saque para la bielorrusa en el segundo saque llegó lo inimaginable: comete doble falta, hay 40 iguales y rompe a llorar. Las imágenes son desgarradoras.
Incluso baja la juez de silla a preguntar que ocurre, porque no parece, en caso alguno, que se tratasen de problemas físicos o tenísticos. Evidentemente, surgen las preguntas y la principal con ‘Vika’ es si tiene que ver con su situación personal y la del conflicto que tiene en su país vecino.
Azarenka fue muy clara con la invasión de Ucrania por parte del Kremlin. «Estoy destrozada. Espero y deseo la paz, y el fin de la guerra», afirmó una de las mejores deportistas bielorrusas de todos los tiempos. No en vano, es campeona en dos ocasiones del Open de Australia (2012 y 2013) y fue tres veces finalista del US Open.
Además, juega ‘sin bandera’ en Indian Wells debido al veto a Rusia y Bielorrusia. No se conoce, de momento, si esta situación personal motivó el hundimiento ante Rybakina, pues lo único que comentó ‘Vika‘ fue «lo siento». Nada más.
