Danielle Collins y Naomi Osaka se enfrentarán por primera vez desde 2019, mientras que Belinda Bencic se enfrentará a Daria Saville en el otro partido de cuartos de final del martes en el Miami Open.
A principios de este año, Danielle Collins entró en el Top 10 cuando avanzó a la final del Abierto de Australia.
Pero como señaló, fue por «solo un minuto». Collins fue la jugadora número 10 del ranking mundial del 31 de enero al 7 de febrero. A la semana siguiente cayó al puesto al número 11.
El próximo lunes, después de que concluya el Miami Open, Collins, de 28 años, puede volver a llamarse una jugadora Top 10. Ella garantizó un regreso con una contundente victoria por 6-2, 6-4, apropiadamente, sobre Ons Jabeur, No. 10 del ranking.
El martes podría ser una prueba más dura, ya que la oponente de cuartos de final de Collins es Naomi Osaka, que se parece mucho a la antigua Osaka que ganó cuatro títulos individuales de Grand Slam.
Osaka ganó 6-3, 6-4 el lunes sobre Alison Riske. Después de sufrir un incidente de abucheos en el BNP Paribas Open, y una abrupta salida en la segunda ronda, Osaka ganó sus seis sets en Miami.
“Al entrar en Indian Wells, mi intención era estar bastante relajada, y luego sucedió eso”, dijo Osaka a los periodistas. “Ahora que estoy aquí, no importa lo que pase, no dejaré que nada detenga mi comportamiento y la forma en que gasto energía en el mundo. Claramente he venido aquí para hacerlo bien, pero si eso no sucede, solo quiero que la gente me recuerde por ser una luchadora”.
El otro cuartos de final presenta a la No.22 Belinda Bencic contra la wildcard Daria Saville. Bencic derrotó a Aliaksandra Sasnovich 6-2, 6-3, mientras que Saville venció 5-7, 6-4, 7-5 a la lucky loser Lucia Bronzetti. Fue el tercer partido femenino más largo del evento con 2 horas y 59 minutos, y el decimocuarto más largo del año.
Aquí hay un desglose de los dos partidos de cuartos de final del martes:
No.9 Danielle Collins contra Naomi Osaka
Si bien Collins ha perdido sus dos partidos contra Osaka, según la clasificación actual, este podría ser más una contienda.
La primera vez que jugaron, hace cuatro años en Beijing, Osaka ocupaba el puesto número 6 entre las jugadoras del Hologic WTA Tour y Collins ocupaba el puesto 37. Osaka ganó 6-1, 6-0. En 2019 en Indian Wells, Osaka ascendió al número 1 y Collins al número 25. Esta vez fue 6-4, 6-2. Aquí en Miami, los papeles se invierten. Collins será una jugadora Top 10 y Osaka cayó al No.77 después de perder 2,000 puntos al ganar el Abierto de Australia 2021.
Después de un comienzo lento para 2022, Osaka ha estado en forma en Miami. Ella ha sido agresiva y decisiva. Ella es la única gran ganadora que queda en la mitad superior del cuadro. Su victoria sobre Angelique Kerber en la segunda ronda fue la primera contra una jugadora Top 20 esta temporada. Y a pesar de que Collins tuvo un bye en la primera ronda, los dos jugaron tres partidos cada una porque Osaka recibió un walkover cuando Karolina Muchova, que venía de un largo tiempo sin jugar, le concedió un walkover en la tercera ronda.
Collins, que no había jugado durante más de un mes después del Abierto de Australia, sufrió una enfermedad viral que la dejó con dolor de cuello. Es la estadounidense mejor clasificada y fue semifinalista aquí en 2018. Contra Jabeur, jugó su mejor partido del torneo. El primer set puede ser más crucial de lo habitual; Collins ganó 31 de 32 partidos cuando se llevó el primer set el año pasado.
“Otra jugadora agresiva, alguien que es un gran competidora”, dijo Collins sobre Osaka. “Así que necesito sentarme, reunir mis tácticas, idear un plan de juego sólido porque creo que cuando Naomi está en la cima de su juego, es muy, muy difícil de vencer”.
Osaka, que participa por sexta vez en Miami, ha igualado su mejor resultado, ahora que ha avanzado a los cuartos de final dos años seguidos. Tal vez sea porque creció cerca de Florida y asistía regularmente al torneo cuando era conocido como el Sony Ericsson en Key Biscayne. Los crepes, recordó, eran increíbles. Intentará igualar la agresión de Collins con alguna ofensa propia.
“Siento que solo necesito tener el control de alguna manera en todo momento”, dijo Osaka. “No puedo dejar que me haga retroceder. Estoy seguro de que [el entrenador] Wim [Fissette] me dará todo el tipo de análisis, pero en este momento mi instinto al pensar en el partido es ser tan agresiva como pueda y poner la pelota dentro al mismo tiempo.»
No.22 Belinda Bencic contra Daria Saville
Hace siete semanas, Saville ocupaba el puesto 627 y jugaba un evento de la ITF de 25.000$ en Canberra, Australia. Ahora, es la primera wildcard en alcanzar los cuartos de final en el Abierto de Miami desde Victoria Azarenka hace tres años. Ella es solo la cuarta wildcard en hacerlo, uniéndose a Azarenka, Venus Williams (2012) y Justine Henin (2010).
En el medio, Saville ganó dos de tres partidos en Guadalajara, luego se clasificó en el BNP Paribas Open y venció a tres jugadoras Top 50: Zhang Shuai, Ons Jabeur y Elise Mertens. Saville perdió ante Maria Sakkari en los octavos de final, por retiro, con una lesión en el muslo izquierdo. Ha luchado contra el dolor crónico de Aquiles a lo largo de los años.
La australiana de 28 años ocupa actualmente el puesto número 249. Saville tiene una ventaja de 2-1 en su cara a cara, pero no han jugado en casi siete años.
Bencic, que llegó al evento con una racha de tres derrotas consecutivas, encontró el equilibrio en Miami, superando a Marta Kostyuk, Heather Watson y Sasnovich. La ganadora de la medalla de oro en individuales en Tokio necesitó solo 78 minutos para derrotar a Sasnovich y aún no ha cedido un set. Abajo 2-1, Bencic se anotó ocho juegos seguidos para asegurar la victoria.
